He estado unos días disfrutando con mis "fieras" de los bosques y otoños andaluces que, como en miles de sitios, son soberbios. La vivencia me ha sugerido algunas reflexiones a compartir con los que estáis intentando difundir la naturaleza como la mejor escuela. Juan Pedro Martínez

Nos sumergimos en la naturaleza y se abren poros, sentidos e imaginación

Brotan los instintos que conectan con nuestro origen y los mecanismos de adaptación al medio que nos han hecho evolucionar.

Surgen los elementos imprescindibles a partir de los cuales hemos construido nuestra esencia.

Aparecen las necesidades básicas y las acciones que el ser humano emprende para tratar de satisfacerlas.