El juego simbólico. Preparación de la ida a la piscina
 
  Texto de orígen: Cols, Carme i Fernàndez, Josep (1993) L'infant i l'aigua, en el dossier "Educació Infantil. Llar d'Infants. Exemples d'unitats de programació, 4" Generalitat de Calatunya. Departament d'Ensenyament. pp 188-190.  
 

En esta edad, los niños manifiestan de una manera natural una importante actividad de exploración y descubrimiento del propio cuerpo. Esto se traduce en mucho interés por desnudarse y volverse a vestir, remover el bolso de la ropa, ponerse las cosas de los otros, etc. En muchas de sus manifestaciones espontáneas podemos observar actividades en las qué su cuerpo y los objetos son utilizados imitando situaciones vividas, como por ejemplo:

  1. Utilización de la botella de colonia y el peine para peinarse. Peinar un compañero, una compañera o la muñeca.
  2. Usar las manoplas y lavarse o ponerse a bañar la muñeca.
  3. Utilizar el agua para hacer comida para las muñecas.
  4. Remover su bolso. Sacarse los zapatos. Desnudarse.
  5. Desnudar el compañero o la compañera y ponerle los pañales.
  6. Servirse de una silla y un colchón imitando que se tumba en la playa o en la piscina.

Orientaciones didácticas

Para acoger, potenciar y hacer crecer estos intereses proponemos, como estrategia, la creación de un ambiente de juego con el nombre de:

El juego de "El agua seca"

Consiste en transformar el espacio de la clase en unos vestuarios y una piscina simbólicos. Un día de la semana traerán de casa el bolso con todo el equipo y jugarán a "ir a la piscina".

Este juego permite crear varias situaciones en torno a las actividades que harán cuando vamos a la piscina de verdad y que representan un trabajo que incidirá sobre aspectos como por ejemplo:

  • Potenciar la necesidad de desnudarse y vestirse.
  • Valorar las posibilidades de cada niño/a para hacerlo.
  • Hacer posible recordar, imaginar, representar sus vivencias.
  • Realizar las actividades ofreciendo diferentes situaciones de juego simbólico: bañar las muñecas sin agua, poner colonia sin colonia, nadar sin agua, etc.
  • Que los niños reconozcan sus objetos personales.
  • Crear la necesidad de ir a jugar a la piscina de agua de verdad.

Para efectuar este juego el espacio de la clase se organizará de la forma siguiente:

En un espacio, muy cerca de dónde estén los bolsos, con dos líneas paralelas de bancos o sillas, procuraremos reproducir los vestuarios de la piscina. Cada niño/a tendrá una silla para colocar la ropa que se sacará y al lado dejará su bolso. En otro espacio habrá los colchones u otros materiales, de acuerdo con el tipo de actividad.

Inicialmente la actividad se centra en desnudarse y vestirse con los nuevos elementos: gorro de baño, zapatillas y albornoz. Las sesiones tendrán una progresión:

  1. jugar a ponerse el albornoz, el gorro de baño y las zapatillas.
  2. mirarse al espejo cuando se lo hayan puesto.
  3. poner bañeras o barreños sin agua para jugar con las muñecas o meterse ellos mismos.
  4. colocar los colchones para representar los movimientos en el agua.

Dedicaremos una sesión semanal hasta que empezemos a ir a la piscina de verdad. La sesión se realizará por la mañana. El día de la semana será el mismo que el que iremos a la piscina (procuraremos que no sea ni lunes, ni viernes). La duración aproximada de cada sesión será de dos horas. Podemos empezar a las diez a preparar el espacio y tenerlo todo recogido a las doce. Proponemos iniciar las sesiones durante el segundo trimestre.

A alguna de estas sesiones, asistirán los monitores o las monitoras de la piscina para conocer a los niños y participar en esta actividad, que, más adelante, se realizará en la piscina de verdad. Este primer contacto servirá para iniciar las relaciones con la piscina, enlazando la actividad simbólica con la descubierta del medio acuático.

Es muy importante que la temperatura ambiente de la clase sea la adecuada.

Inicialmente, esta actividad requiere un mínimo de tres personas adultas para atender y responder las demandas de cada niño. Estas personas pueden ser: un padre o una madre, la persona de refuerzo del equipo (si la hay), y el maestro o la maestra. Tambè se puede aprovechar, para hacer esta actividad, cuando haya estudiantes en prácticas en la escuela.

Trabajo con las familias

Directa o indirectamente, esta actividad hace de hilo conductor de otras situaciones que hacen participar a las familias en el proyecto común de la educación de los niños.

Es una actividad que requiere una preparación previa escuela-familia y con el equipo de profesionales de la piscina.

La justificación de esta actividad es el hecho de ir a la piscina, si bien existen otras intenciones educativas que podremos trabajar teniendo en cuenta un proceso: ir preparando el equipo de ir a la piscina, identificar sus cosas, aprender a vestirse y a desnudarse, etc.

Se realizará una reunión conjunta, padres, monitores/as de la piscina y maestros, para prever diferentes aspectos:

  • Como han de ir vestidos los niños para facilitar su autonomía.
  • El material que tienen que llevar dentro del bolso: bañador, gorra de baño, zapatillas, albornoz y una toalla pequeña para los pies; incidiendo especialmente sober el uso correcto de los nombres de estos elementos.
  • Como tiene que ser la bolsa: que se la puedan colgar en la espalda para tener las manos libres; que la abertura sea lo suficientemente ancha para introducir todos los elementos; que se pueda cerrar y abrir con cremallera, nunca con cordones.
  • La relación afectiva y la relación con la escuela que podrán establecer en el momento de preparar la bolsa en casa.
  • Facilitar que las familias, conjuntamente, se puedan organizar para elaborar el albornoz o para comprarlo, en caso de no disponer de él.
  • Saber como tienen que ser las gorras de baño, el albornoz, etc.

Conviene tener muy claro el proceso que enseñaremos a los niños y las niñas para desnudarse y dónde lo dejaremos todo. En la explicación que un niño hizo a su madre lo vemos reflejado:

"Ayer tuvimos mucha actividad en casa. Joan explicaba que habíais jugado con agua seca y encontró que con las palabras no tenía suficiente y pasó a los hechos. La colxoneta era la piscina de Cornellà "seca", la silla del comedor era su silla y la madre era la maestra (lo dice Carme)

- Ayúdame, con los zapatos no puedo.
- Los zapatos debajo de la silla, ahora el otro también.
- Los calcetines (se los saca). Aquí, los calcetines aquí! (los introduce en los zapatos, primero uno y después el otro)
- Ahora el jersey, Carme. Ayúdame, no puedo.
- El jersey aquí (lo coloca en el respaldo de la silla).
- La camiseta también, yo solo. No puedo, Carme ayúdame (y la deja plegadita sobre el respaldo). Todo aquí, la camiseta plegada.
- Ahora los pantalones, yo me siento así.
- Ahora los calzoncillos, caen!, Carme.
- La bolsa, el albornoz en la silla (coge el bañador y se lo pone con un poco de ayuda).
- La gorra no, después.
- Ahora a la piscina. Nadamos!

Los niños son tremendamente observadores y captan muy pronto los puntos de referencia que les facilitan su acción. Los ritos son la base para dar estos puntos. Reproducen a casa sus vivencias antes de ir a dormir y en otros momentos.

Un buen reportaje de fotos o diapositivas, o un vídeo, también nos puede ayudar a dar puntos de referencia a los niños y a la familia.

Es necesario considerar que cada niño/a tiene su ritmo y lo debemos respetar. Asimismo, inicialmente o en diferentes momentos del proceso, nos podremos encontrar con niños que no quieran participar. Debemos respetarlos: ofrecerles muchas oportunidades, hacerles ver el gozo de los otros, invitarlos, etc.