Recolección de plantas
 

Los niños o las familias nos traen plantas a la escuela. Las maestros las podemos recolectar. El servicio de parques y jardines de cada pueblo o ciudad dispone de materiales interesantes.

En ciertas ocasiones: celebraciones o fiestas especiales, para hacer alfombras de flores o montajes ornamentales las tiendas o servicios municipales disponen de material en cantidades industriales. Puede ser una buena ocasión para conseguirlo a buen precio.

Sí vamos a recolectar plantas al campo o al bosque llevaremos un cesto, unas tijeras y unos ojos bien abiertos. Pero, ¿con qué finalidad? ¿Queremos hacer ramos para dejarlos secar? ¿Queremos hacer poupurri? ¿O simplemente queremos recoger diferentes materiales: piedras, cortezas, caparazones de caracoles...? En cada caso deberemos llevar el material correspondiente: bolsas para objetos diversos, cordel o tiras de rafia para atar los ramos, etc. Recordemos que es necesario respetar el entorno natural si queremos que éste mantenga su equilibrio.

Todos los elementos que conforman un ecosistema tienen su función. Procuraremos siempre que nuestra acción sea lo más beneficiosa posible. Durante la recolección debemos tener en cuenta que conviene respetar el crecimiento y la reproducción de las plantas, en especial las que sean menos abundantes. Por ello:

  • Dejad flores suficientes para que puedan elaborar semillas.
  • Cortad los tallos por encima de la tierra dejando las raíces para que la planta pueda volver a crecer.

Es recomendable recoger las plantas los días secos y soleados a partir del mediodía. Los materiales vegetales se tienen que guardar siempre bien secos. Las muestras recogidas se pueden ir guardando en el cesto. Cuando se acaba la recolección podéis clasificar los materiales, hacer racimos o bien prensar las plantas.